24 Domingo de Tiempo Ordinario (English)
El comentario para esta semana es presentado por Obispo John Dolan de la Diócesis de San Diego. Para mas, visite http://www.christ-ion.com
Oración
Padre amoroso, Diste a Tu Hijo como sacrificio por nuestros pecados. ¿Como podemos negar el perdón de otros cuando consideramos lo que Él ha hecho por nosotros? Ayúdanos a fijarnos en la cruz cuando fallamos de ser cariñosos y misericordiosos. Amén.
Comentario 1ra lectura: Sirácides 27: 30-28: 7
"Cosas abominables son el rencor y la cólera." Estas son las primeras palabras de nuestra lectura de Sirácides este fin de semana.
Es muy humano estar enojado e incluso tener ataques de ira. Pero permanecer en la ira es otra cosa.
En su libro, "El Enojo Mata", el Doctor Redford Williams nos recuerda que una dosis continua de ira es malo para el cuerpo. Es como un "veneno de acción lenta". Una cosa es estar enojado cuando algo grave te sucede. Es otra cosa estar enojado cuando alguien está manejando despacio delante de ti.
Si sabemos que la ira es veneno para nosotros, ¿cómo podemos pensar que alimentaría a otro? Sirácides pregunta," ¿Si un hombre le guarda rencor a otro, le puede acaso pedir la salud al Señor?"
La alternativa a la ira es el amor y el perdón.
Podemos pasar toda una vida tratando de desviar a quienes nos perjudicaron a través de nuestra ira y falta de perdón. Pero, nunca creceremos. Nunca alcanzaremos el ideal Cristiano.
Incluso cuando la mayoría de la gente ideológica está empeñada en destruyéndonos o nuestra nación, podemos orar por ellos. Su ira no tiene por qué ser mi ira.
Preguntas
¿Cómo manejas tu ira?
Comentario Segunda lectura: Romanos 14: 7-9
En su carta a los Romanos, San Pablo escribe, "Ninguno de nosotros vive para sí mismo, ni muere para sí mismo."
En este mundo donde vivimos detrás de nuestros teléfonos celulares y computadoras, estamos cada vez más aislados de Dios y otros. La gente no solo se aleja de la Religión. Están alejándose de la humanidad.
Thomas Merton escribió:
"Cuando un hombre intenta vivir por y para él solo, se convierte en una pequeña "isla" de odio, codicia, sospecha, miedo ... Toda su perspectiva de la vida está falsificada. Todos sus juicios son afectados por esa falsedad. A fin de recuperar la verdadera perspectiva, que es la del amor y la compasión, debe aprender una vez más, en la sencillez, la verdad, y la paz, que 'Ningún hombre es una isla'."
El Señor mismo escogió no vivir una vida solitaria en los Cielos. Más bien, se convirtió en uno de nosotros e incluso murió por nosotros para que pudiéramos vivir con él. Nunca fuimos creados para vivir solo. En el principio, Dios dijo: "No es bueno para el hombre que este solo."
Vivir en comunión y en el amor unos con otros y con el Señor es el ideal Cristiano. Vivir en la soledad nos pone en un lugar peligroso.
Preguntas
¿Conoces a alguien que vive en la soledad? ¿Qué puedes hacer para que viva en comunión con Dios y con otros?
Comentario Evangelio: Mateo 18: 15-20
La semana pasada leímos las palabras de Jesús en Mateo que debemos de tratar a aquellos que nos han ofendido como gentiles y recaudadores de impuestos. En nuestro comentario, se nos recordó que Jesús trató a los recaudadores de impuestos y gentiles muy bien. En otras palabras, no podemos renunciar nunca a nuestra misión de perdonar y amar.
Esta semana, Pedro pregunta a Jesús si estaba esperado que el perdonara siete veces. Siete, en la cultura judía, es un número perfecto. En otras palabras, Pedro pregunta: "¿Debo perdonar infinitamente?" Jesús responde con "setenta veces siete" - o "más allá del infinito".
En nuestro mundo que es menos que infinito, estamos acostumbrados a un principio, un medio, y un fin. Pensamos: "Tiene que haber un fin a esta larga saga o drama." En el Mundo de Dios, la saga continúa, porque Él es el Alfa y el Omega, el Principio y el fin.
Si elegimos vivir en el Reino de Dios, podemos parar de perdonar cuando Dios nos dice que dejemos de perdonar. Desafortunadamente para nosotros, Cristo no nos da una fecha ni hora en que nuestro perdonar puede cesar. El perdón debe ser tan interminable como Él es interminable.
Pregunta
¿He dejado de perdonar a una persona en mi vida? ¿Puedo ofrecer una oración de perdón para los que amenazan con hacerme daño a mí, mi comunidad o mi país?
La Tarea de Esta Semana
La semana pasada, fuiste invitado a reflexionar sobre el Prólogo del Catecismo de la Iglesia Católica, artículo 25. El propósito era para ver que el Catecismo y las enseñanzas de la Iglesia no son un martillo para vencer a la gente en la sumisión. "En todas las cosas la caridad" lee el Prólogo. A menudo, nos enojamos al tratar con aquellos que no entienden nuestra enseñanza o no eligen para conformarse con nuestra doctrina. Si empezamos nuestras conversaciones en asuntos de la iglesia con caridad, amor y perdón, podemos ganar a un amigo. Sin embargo, debemos terminar nuestras conversaciones con el mismo amor y perdón. ¡Inténtalo!
Oración de Grupo
El grupo dice juntos lo siguiente del prólogo del Catecismo de la Iglesia Católica, Artículo 25:
Toda la preocupación de la doctrina y su enseñanza debe dirigirse al amor que nunca termina. Si algo se propone para la creencia, para la esperanza o para el acción, el amor de nuestro Señor debe estar siempre accesible, para que cualquiera pueda ver que todas las obras de la virtud Cristiana perfecta brota del amor y no tienen otro objetivo que llegar al amor.
La oración continúa con el Salmo 102
Salmo Respuesta: El Señor es compasivo y misericordioso.
Bendice, al Señor, alma mía; que todo mi ser bendiga su santo nombre. Bendice, al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios.
R. El Señor es compasivo y misericordioso.
El Señor perdona tus pecados y cura tus enfermedades; él rescata tu vida del sepulcro y te colma de amor y de ternura.
R. El Señor es compasivo y misericordioso.
El Señor no nos condena para siempre, ni nos guarda rencor perpetuo. No nos trata como merecen nuestras culpas, ni nos paga según nuestros pecados.
R. El Señor es compasivo y misericordioso.
Como desde la tierra hasta el cielo, así es de grande su misericordia; como un padre es compasivo con sus hijos, así es compasivo el Señor con quien lo ama.
R. El Señor es compasivo y misericordioso.
Concluir con un NUESTRO PADRE.
Para obtener más información, visite Cristo en nuestro vecindario en WWW.CHRIST-ION.COM
No comments:
Post a Comment